Según un episodio de MythBusters en el canal Discovery Channel en el año 2014, la mayoría de las aerolíneas tienen un proceso de abordaje equivocado. Abordar 173 pasajeros desde la sección de atrás hacia los asientos delanteros es el proceso más lento (24.29 minutes). La forma más rápida es el embarque al azar sin asientos asignados (14.07 minutes).
Incomodidad o rapidez
La prueba midió dos variables. Comodidad y rapidez. Mientras la forma al azar era la más rápida, también era la más incomoda. La forma tradicional de abordar (de la parte de atrás hacia adelante) también se calificó como incomoda. Otras formas, variaciones de método WILMA (primero asientos de ventana, después asientos del medio y finalmente asientos del pasillo), eran mucho mejor.
No ambos sentidos
Me gusta comparar la industria de aerolíneas y aeropuertos con el negocio internacional en general y el ejemplo de abordaje una vez más nos enseña que no existe ‘la mejor forma’ en dos sentidos. Anarquía puede ser rápido, pero la incomodidad o el estrés puede ser abrumador. Otros terceros, que no sean los pasajeros, tienen que aliviar el proceso y crear una balanza entre comodidad y rapidez.
Aliviar el proceso de embarque
Para el éxito de la expansión internacional, las compañías tienen que buscar la balanza entre comodidad (o incomodidad) y rapidez durante el proceso. Esa balanza normalmente se encuentra a través de involucrar otros con experiencia y pericia para aliviar el proceso y para que las compañías no solo vean obstáculos, ni solo oportunidades.
No es una prueba
Expandirse internacionalmente pasa por fases. La intención estratégica efectivamente es la primera fase. Aliviar el proceso es la secunda y la tercera fase crucial es la determinación y la persistencia. Especialmente durante los tiempos de incomodidad y la falta de resultados instantáneos. Uno sale de avión en su destino, al finalizar el vuelo. La expansión internacionalmente no es una prueba.